Opinión: La Amistad.-

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Doris JOBAL
Por Doris de la Cruz  Cuello.-
En varias ocasiones leí un escrito muy lindo donde comparaban la amistad con un árbol con  muchas hojas y muchas ramas que representaban los tipos de amigos. Y pudiera ser una buena metáfora.

¿Qué es la amistad? Es una gran pregunta. Existen muchas definiciones, “muchos tipos”, pero de la que quisiera hablar ahora es de la verdadera amistad. Esa en la que te sientes pleno, conectado a esa persona; te entregas sin sacrificio, es un placer porque él o ella forma parte de ti.

Y se preguntarán… ¿Cómo encontramos esa amistad? Es sencillo. No hay que buscarla. Llega sola a ti, sin esperarla, sin que te des cuenta. Te sorprende, y de repente, sin darte cuenta, tienes un/a gran amigo/a.
Esta amistad no es perfecta, pasa por muchas pruebas, pero son estas las que te hacen comprobar que no te equivocaste al confiar en esa persona. Al entregarte. Desde luego no todo es color de rosa, como en cualquier relación. Es bueno tener definidas tus prioridades al momento de una situación incómoda.
 Es esencial saber manejarte cuando estás enojado porque no es recomendable tomar decisiones permanentes bajo emociones temporales. Es un grave error. Hay que cuidar las palabras que decimos cuando estamos molestos. Puede que las digamos para desahogarnos en el momento pero en el corazón de quien las escucha podrían quedar marcadas para siempre. Y aún peor, podrías perder una gran amistad por una tontería. Por un mal entendido.
Valora las amistades de verdad, sobre todo en una sociedad como es esta. Donde se han perdido tantas cosas. En una sociedad desconfiada, desalmada, inhumana, poco solidaria, son los pocos los que contradicen estos adjetivos con sus acciones. Así, que si encontraste a alguien, no lo dejes ir. Dale lo mejor de ti y no lo/a maltrates.
Para mantener una amistad hay que ser humilde. Tienes que saber pedir perdón cuando lo amerita la circunstancia. Claro, sin dejar que te humillen tampoco. Tienes que dar sin esperar nada a cambio porque una verdadera amistad es desinteresada. Es casi mágica. Siempre tienen temas de conversación, el tiempo se les pasa volando. Son como esos hermanos que sí pudiste elegir. Y aveces son más cercanos a ti que cualquier familiar.
Es la combinación de dos almas afines que se unen para complementar esa otra parte.
Y lo digo sin miedo a parecer muy profunda porque sé que esto te hará pensar y meditar acerca de tus amistades. Te hará identificar esos verdaderos amigos. Esos merecedores de todo tu aprecio. Esos que han estado ahí en las buenas y en las malas.
Sé que en el transcurrir de la vida darás tropezones que te harán endurecer tu corazón, pero que esto no te haga perderte del amor que aún existe, de la bondad y de la gente dispuesta a dar lo mejor de sí por ahí. Mantén tu corazón perceptivo y a la vez cauteloso ya que de seguro no querrás que te lastimen, aunque tampoco querrás perderte de una gran amistad.

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