DIARIO VISION.-Se acercan las elecciones electorales de mi país, República Dominicana, y al ver cómo funcionan las cosas en los últimos tres meses previo a acercarse el certamen electoral, me he puesto a pensar que interesante sería si en mi país hubiese elecciones todos los días.
Las personas no tendrían que pasar trabajo pidiendo una ayudita a los candidatos y figuras políticas, ya que estos se tomarían la molestia de ir personalmente barrió por barrio y calle por calle a ofrecer y que quede claro a resolver los problemas habidos y por haber.
Además el circulante de dinero seria notorio, sin dejar atrás las funditas de comida los tiques para gasolina, las canastas navideñas medicinas, los útiles escolares, juguetes medicinas en farmacias, entrega de cinc, cemento y sin dejar de mencionar los sobrecitos.
Y no puedo dejar a un lado la singular simpatía que “algunos” de nuestros candidatos, nos demostrarían a diario. Las selfies, los mano a mano, el chocolate en el barrio, las reuniones, el apretón de mano, los abrazos que nos hacen entender que esos personajes son tan allegados a la gente que ni pensar que hace cuatro años atrás muchos de estos ni se les veía la placa.
Nuestros representantes tendrían tiempo suficiente como para escuchar nuestros reclamos y quejas, y los más importante de todo seriamos tomados en cuenta en la participación para la solución de nuestros problemas.
La esperanza reinaría, y ya no habría que preocuparse por problemas de acceso a la salud, educación, empleo y otros derechos fundamentales.
Ya no sufriríamos tantos apagones gozaríamos de 24 horas de luz, aun en aquellos sectores más empobrecidos y marginados de todas las zonas de la República Dominicana, sin importar su condición social.
Bueno de verdad me encantaría que los 365 días del año, contáramos con la presencia de candidatos y autoridades políticas que se mostraran realmente interesados en el pueblo en la solución a sus problemas y la visualización de un país garante de los principales derechos fundamentales de todo ciudadano, de una sociedad más digna, transparente de una “República Dominicana libre e independiente”